Disculpen que hace varios días que no haya escrito nada. Es que el uifi de los aeropuertos es muy caro, y resulta que mis padres se han dado al turismo aeropuertuario (no repetiré esta palabra, porque las palabras con muchos diptongos me disgustan). No sé que bicho les picó, pero ahora me han crecido los enanos con esto de que todos o casi todos los días envuelvan ropa y otras cosas en recipientes rectangulares y los lleven al aeropuerto, como si allí hubiera algo realmente importante que hacer.
A veces, no sé con qué criterio, vamos a otro aeropuerto, del que se van enseguida y hastiados. Pero después de todo lo que criticaron el estar allí ¡vuelven! Y no a uno nuevo, sino al último en que estuvieron. Sé que parece de locos, pero ellos son así, incansables en la esperanza de conseguir algo mejor del mismo aeropuerto anterior. Otra cosa rara de mis padres. Salvo eso, no mucho más que contar. En los últimos días conocí mucha gente divertida, pero no sé porqué casi todos son extranjeros.
Hace 3 años
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